viernes, 6 de marzo de 2009

Por que, el ¿por qué? de los niños tiene su por qué

¿Por qué pides más respuestas?
¿Por qué preguntas lo que siento?
¿Por qué no abres las puertas?
Si sabes que no hay arrepentimiento.

Hay tantos ¿por qué?
Y respuestas por doquier
Abundan los no se
Y aquí seguimos sin saber.

Si se acerca la desconfianza
¿Por qué no lo alejamos con firmeza?
Pues viendo tu belleza
Fortaleces la paciencia.

Si pedimos respuestas
Hagamos las cosas bien
Aclaremos las preguntas
Y sigamos con buen pie.

Si respondo a tus preguntas
Por que sabes las respuestas
Ábreme las puertas
Que tienen como llave la paciencia.